"Control + Alt +Supr", bolígrafo sobre papel, 24 x 33 cm |
A mi madre le habían operado tantas veces del corazón que yo solía decirle, entre risas, "pídele a los médicos que te pongan un velcro en el pecho, así no trastearán tanto y todo quedará más a mano". "Ea, pues mira", solía contestarme ella sonriendo.
El día que se fue era lunes. Estaba en el hospital cuando decidió parar el tiempo y colocarlo, dobladito, bajo la almohada de la cama en la que descansaba. No quiso esperarme. Se marchó así, con su alegría bajo el brazo, en uno de sus arranques de genio manchego que gastaba.
Los médicos nos dijeron que murió por fallo cardiaco, mientras dormía. No es cierto. A mi madre lo que le falló fue la vida, mientras soñaba.
Porque su corazón era infalible y la vida, a veces, un error de corrección.
Pd: aquí está el post de Platos Desechables que inspiró este dibujo y , a la vez, esta historia.
Cuando comencé a trabajarlo no sabía que, sin darme cuenta , lo estaba ligando a la despedida de mi madre. Salió así solito. Espero que os guste, al igual que el relato de Nacho.
Besos, abrazos y hasta la siguiente.